Dawn Aerospace está preparada para comenzar las pruebas supersónicas de su avión espacial Mk-II Aurora.
La Autoridad de Aviación Civil de Nueva Zelanda (CAA) ha otorgado a Dawn un certificado que permite al Mk-II Aurora volar a velocidades ilimitadas y alcanzar una altitud máxima de 80.000 pies, según anunció la compañía el 12 de julio.
«Esto marca un hito significativo en el rendimiento del vehículo Mk-II, específicamente en el vuelo supersónico», declaró Stefan Powell, CEO de Dawn, en un comunicado. «Hasta donde sabemos, será la primera aeronave de este tipo financiada con fondos privados en romper la barrera del sonido».
Entre julio y septiembre, Dawn tiene planeado realizar una serie de vuelos de prueba, no más de una docena. El objetivo principal es «expandir la envoltura del vehículo» para alcanzar Mach 1,1 y una altitud de 20.000 metros. Como objetivo secundario, Dawn busca realizar dos vuelos diarios, avanzando hacia la reutilización rápida.
«En su máximo rendimiento, el Mk-II volará más rápido y 2,5 veces más alto que cualquier otro avión que haya despegado de una pista», afirmó Powell. «Este es el poder de llevar el rendimiento de un cohete a la plataforma de un avión».
El certificado de la CAA también permite al Mk-II Aurora operar más allá de la línea de visión en espacio aéreo no restringido.
El Mk-II Aurora es un avión propulsado por cohetes diseñado para despegar y aterrizar en pistas, que realizó su primer vuelo en 2021. Desde entonces, Dawn ha completado 50 vuelos utilizando motores a reacción y cohetes.
Dawn está comercializando el avión espacial para misiones de microgravedad, investigación de vuelos de alta velocidad, observación de la Tierra y otras aplicaciones civiles y de defensa.
Para obtener la certificación que permite realizar pruebas de vuelo cada vez más ambiciosas, Dawn Aerospace ha trabajado durante años en estrecha colaboración con la CAA, la Agencia Espacial Neozelandesa, compañías aéreas y otros aviadores.
«Lograr esta certificación es un testimonio del arduo trabajo y la dedicación de nuestro equipo, así como de su capacidad para operar un vehículo de tan alto rendimiento con los estándares que la CAA espera de cualquier operador de aeronaves», dijo Powell. «Me gustaría agradecer públicamente a todos los organismos públicos de Nueva Zelanda y a los usuarios del espacio aéreo local por su continuo apoyo a nuestra misión de transporte espacial escalable y sostenible».
En su último vuelo en 2023, el Mk-II alcanzó una velocidad máxima de 200 nudos y una altitud máxima de 2.743 metros. Desde entonces, el vehículo «ha sido sometido a extensas mejoras y pruebas», según el comunicado de prensa.
La prueba final de los sistemas de prevuelo, por ejemplo, incluyó encender y apagar el motor durante 60 segundos.